Rus y la informática

Publicado en el diario Levante en 9/9/2009

Una cosa es predicar y, otra, dar trigo

Alfonso Rus empezó diciendo, allá por 1998, que quería un centro de ocio con hotel. Después cambió y anunció que se instalarían los cines. Siempre dijo que primaria el aspecto lúdico sobre el aspecto comercial. A mediados de noviembre, abrirá en Xàtiva el primer gran centro comercial donde los espacios de ocio han quedados reducidos a una bolera, una pista de hielo y cines, que abrirán después de la campaña de navidad. Casi un centenar de tiendas en el una pequeña parte son franquicias que ya están establecidas en el centro de la ciudad y la mayoría grandes marcas como Zara o Cortefiel que llegan por primera vez a la Costera. Algunos comerciantes locales –muchos menos de los deseables– han apostado por abrir también en el centro comercial del río Canyoles. El pasado abril, Rus aseguró que se había limitado el espacio para las franquicias. Pero no se limitó el número. Ningún centro comercial abriría si no tuvieses seguro que más de un 80% de sus tiendas son grandes marcas.Ya se sabe que una cosa es predicar y, otra, dar trigo. Al final, el gran perjudicado: el comerciante de toda la vida.

Empieza el curso en la Universidad de Xàtiva...

Otra de las famosas promesas incumplidas de Alfonso Rus es la célebre Universitat de Xàtiva. Respecto a los estudios universitarios, Rus las ha dicho de todos los colores. Incluso contradiciéndose a si mismo. Durante años defendió que los estudios que se habían creado en Xàtiva –llámenlos Módulos de Formación Profesional– eran un principio para una gran extensión universitaria. Alfonso Rus llegó a anunciar que Xàtiva podría acoger hasta 3.000 alumnos. Lo más grave, además de que no ha cumplido nada de lo que ha dicho, es que lleva más de 12 años diciendo que la Universidad esta a punto de llegar. Su penúltimo anuncio fue en 2003, cuando prometió que el nuevo edificio juno a San Agustí sería la sede de la extensión universitaria. Seguimos esperando...

Ahora que se acerca el otoño...

L'Albereda llena de hojas, grandes jardines para pasear, los primeros fríos y el recuerdo del último amor de verano. En este paisaje bucólico-cinematográfico debía estar pensando el alcalde, Alfonso Rus (PP), cuando anunció que Xàtiva tendría un festival de cine. Rus abrió la puerta a las ilusiones después que Kepa Sojo filmase en Xàtiva su película El síndrome de Svensson. Tan brillante idea se le ocurrió en mayo de 2005. Dijo que la primera edición se celebraría ese mismo otoño. Es decir, con el de 2007, llevaremos tres ediciones perdidas... y nuestras esperanzas siguen frustradas.

Una historia real

De muchos es conocida la afición de Alfonso Rus a salir en las fotos. Pero no es que lo diga la oposición ni mucho menos. Tampoco es que lo digamos nosotros. Es que lo reconoció él mismo en una entrevista en el diario Levante. Tanto es así que es capaz de inventar la historia más inverosímil para salir en los «papeles». Una vez llegó anunciar que la Reina Sofía inauguraría el Teatro de Xàtiva...

Pedir por pedir

Alfonso Rus lleva meses atribuyendo a Zapatero la existencia de robos en la Costera. Según Rus, se debe a la falta de guardias civiles o de policia nacional, según se levante ese día. Nadie recuerda que hace pocos meses, Rus prometió instalar cámaras de vigilancia en los edificios públicos y aseguró que contrataría vigilancia privada. La paradoja es que Rus critica las «eternas promesas» y asegura que se tracta de una «auténtica tomadura de pelo». Y las promesas de Rus, ¿que son?

Promesas que afectan a las personas

Las falsas promesas no serían ningún problema si no afectasen a las personas. Es el caso de las obras en los edificios del barrio del Carmen, afectados por aluminosis. Hasta tres titulares diferentes ha proporcionado el PP. El más grave, el último: las obras no han comenzado un año y medio después y algunos vecinos han muerto esperando la solución... Si Alfonso Rus es especialista en vender humo, otro que tal baila es Vicente Parra, su eterno delfín.